Un breve recorrido por los antecedentes de las artes electrónicas nos lleva directo a la programación de la segunda edición de Órbita, que se realizará el viernes 12 de julio en el Club Cultural Matienzo. Conocé de qué y de quiénes se trata en esta nota.

Los avances tecnológicos, cada vez más veloces, acaban por tomar dimensiones iguales de asombrosas en nuestras vidas. Esto, claro está, no es ninguna sorpresa hoy, mucho menos en el mundo del arte, que guardó desde siempre una relación casi directa con los nuevos modos de producción y las nuevas tecnologías.

Desde principios de siglo XX, estos diversos desarrollos fueron claves a la hora de intervenir en el arte: podemos pensar, por ejemplo, en la aparición de instrumentos musicales como los sintetizadores, que tuvieron su auge a partir de la década del ‘60 y fueron fundamentales en el viraje hacia la música electrónica años después, mutando paulatinamente en drum machines, samplers y sequencers, entre otros.

No es menor lo sucedido en el mundo audiovisual, que ya hacia la última década del siglo XIX había tenido sus primeras proyecciones cinematográficas y desde entonces, no se quedó atrás con su evolución técnica. Por último, también son importantes los desarrollos nacidos en el ámbito militar, que tienen una vitalidad absoluta hoy, como las computadoras y la red de Internet.

Ahora bien, ¿qué tienen que ver estos “inventos” con el mundo del arte? En muchas oportunidades, los artistas han hecho uso de estas innovaciones para desarrollar su obra. Si bien sobran ejemplos, podemos tomar algunos movimientos de manera puntual para poner de relieve esta relación. Ligado a Internet surge el net art, producciones realizadas en y para la web. En relación a los distintos formatos de registro audiovisual y el aparato de TV, aparece el videoarte. Y a partir de los distintos softwares de computadoras nacen diversas manifestaciones de arte digital. Estos casos puntuales sirven para poner el foco en un área del arte contemporáneo, una categoría que agrupa las disciplinas mencionadas bajo el nombre de artes electrónicas.

Las subcategorías mencionadas se conectan con otras disciplinas como la música electrónica, que recibió una fuerte influencia de los nuevos instrumentos que, a su vez, propiciaron un nuevo sonido en las composiciones. El basto mundo de la música electrónica engloba cientos de subgéneros (house, techno, IDM, entre otros).

Más adelante, los DJs comenzarían a hacer uso de los vinilos para mezclar música en vivo, mientras que las bandejas propiciaban, cada vez más, novedosas herramientas. Al mismo tiempo y de forma similar, aparece también la figura del VJ, que acompaña la música en vivo del DJ con la proyección de visuales.

En la escena artística independiente de Buenos Aires han aflorado en el último tiempo eventos y trabajos colectivos orientados a estos estilos. Capitalizan estas innovaciones a partir de la difusión del trabajo de jóvenes artistas formados con y en estas tecnologías.

Además de ciclos destinados a música electrónica de autor como Internacional Bailable, que busca hacer de la fiesta un espacio de integración; otros eventos proponen instalaciones como Noches de Ansiedad, organizado por el colectivo Ansiedad, y Sesiones Cercanas del Primer Piso, organizado por Club Cultural Matienzo, que también contó con performances y talleres.

¿Qué es Órbita?

Órbita surge de la hibridación de dos colectivos: Ansiedad e Internacional Bailable, y suma también artistas independientes. Con la música y las instalaciones audiovisuales como eje, el ciclo que el 12 de julio vive su segunda edición en el Club Cultural Matienzo, propone un diálogo entre distintos formatos artísticos y géneros musicales, respondiendo a las necesidades de estrechar lazos y promover la colaboración.

  • DJ Gargantúa Órbita Vol. 1 Foto: Giuliana Mastrangelo
  • Rocío Morgenstern en Órbita Vol. 1 Foto: Giuliana Mastrangelo

El primer volumen de Órbita se presentó en el escenario de La Confitería en el mes de abril, abarcando un recorrido desde la canción pop de autor(a) hasta los beats electrónicos más bailables, rodeado de un cálido planteo estético de artes visuales digitales e instalaciones interactivas. Convivieron en una misma noche shows en vivo analógicos y digitales, performances, DJ y VJ sets.

Conocé el Line-up del Vol.2

En esta ocasión Órbita Vol. 2 busca elevar la apuesta con un line up especialmente curado y distribuido en dos escenarios, nuevas instalaciones y un clima festivo. El evento invita a celebrar el espíritu colectivo y la diversidad de las manifestaciones artísticas, en medio de una experiencia inmersiva de goce, respeto y creación.

  • Siria
  • ElMapa

En la misma línea en que venían trabajando, el eje está puesto en producciones de impronta fuertemente electrónica, tanto en las instalaciones como en la elección de músicxs en escena.

¿Quiénes participan de esta velada?

Siria: es el proyecto solista de Emiliano Araujo, que combina elementos del hip hop, R&B y la electrónica, haciendo uso de beats downtempo y melodías rapeadas. Cuenta con dos singles Nirvana y Dormi2 y una participación con SAINT-ANDREU en Menta. En la segunda mitad de 2019, estrena EP.

Elmapa: liderado por Matías Olivastri, músico y compositor. Propone una geografía sonora plagada de sonidos cósmicos y ambientales, coqueteando con el electropop. Su segundo disco Fuera del área de cobertura es un material mucho más abocado a lo lúdico y lo experimental, donde cobran protagonismo los loops, texturas y arreglos que sugieren una interacción con el mundo de lo digital e intangible.

  • Coghlan
  • Trópico

Coghlan: empezó en 2017 con el disco Bolero Midi. Sus nuevas canciones afilan el potencial pop de su primer disco, influenciadas por la euforia de Ibiza y la curiosidad del city pop japonés, la sugestión impresionista y el misterio de la nostalgia.

Trópico: dúo de música experimental electroacústica que explora el límite entre la improvisación y la canción. Mucha de la riqueza y diversidad de las propuestas nace de poder capturar lo efímero y adaptarse a los espacios/situaciones en las que se presentan, pudiendo tocar tanto en una fiesta como en una obra en construcción sin espectadores.

  • Giskard
  • Gargantúa

Giskard (DJ set): militante de la escena underground nacional, sus sets combinan el minimal y micro house. A principios del año 2018 se integra al colectivo de música y artes electrónicas Internacional Bailable.

Gargantúa (Live set): es un productor independiente inspirado en el techno underground y la contracultura, su sonido bailable se fusiona con elementos de la música industrial, el electro minimal, electropunk y postpunk.

Mímesis

Mímesis: performance realizada por Lucía Giachero (bailarina, docente e investigadora, especializada en danzas urbanas) y Laila Meliz (investigadora, Bgirl, performer y realizadora audiovisual, formada en danza jazz y clásico, luego comenzó a competir en breaking).

Por su parte, en el área de instalaciones y visuales participarán Nipkow con una instalación analógica en vivo con televisores crt, mixers, procesadores y cámaras; Tom (VJ set); Tramo Estudio, con una instalación en material textil o plástico a través de la técnica de plegado manual; Placebo Yue (VJ set), Awe (VJ set y proyección sobre tela), Coral (instalación lumínica), Astutti (instalación óptica) y Alejandra Tokatlian (proyección).