El ranking que reúne a las diez obras de arte más caras de la historia incorporó los nombres de dos artistas franceses, Pierre Seurat y Paul Cézanne, luego de que se realizara "la subasta del siglo", de pinturas pertenecientes a Paul Allen, uno de los cofundadores de Microsoft, por la que se recaudó más de 1.600 millones de dólares.
Con esta subasta, el top ten de las obras más caras de la historia tuvo modificaciones en los puestos 6 y 9, de donde desplazó a nombres como Pablo Picasso y Claude Monet, para incorporara "Las modelos, Ensamble (versión pequeña)", de Georges-Pierre Seurat, vendida por 149 millones de dólares, y "La montaña Sainte-Victoire", de Paul Cézanne, vendida por 137,7 millones.
La colección de arte del fallecido Allen (1953-2018) se convirtió en la más valiosa de todos los tiempos e incluyó cinco obras que se vendieron por más de 100 millones de dólares cada una. Sin embargo en la selección no hay mujeres, y a pesar de que aparecen a modo de representación en muchas de estas obras, no lo hacen como autoras, lo que resalta el gran problema de desigualdad que aún persiste en el mercado.