Si te apasionan los casos policiales sin resolver, te proponemos una selección de producciones documentales en la línea de Carmel: The Starcaise, Shadow of truth, Casting JonBenet, Unsolved Mysteries y El caso Alcásser.
Recientemente, Netflix estrenó Carmel: ¿Quién mató a María Marta?, la docuserie sobre el asesinato de María Marta García Belsunce. Fue un éxito. El caso tiene un elemento típico del policial clásico, que se remonta a Los crímenes de la calle Morgue, de Edgar Allan Poe: el cuarto cerrado como lugar del crimen. El hecho de que se trate de un country, un espacio cuyo acceso suele estarnos vedado, nos permite además asomarnos a la vida de una clase social que en general nos resulta ajena.
El caso Belsunce muestra la otra cara de lo familiar, lo siniestro, lo cotidiano que se vuelve inquietante. El barrio, la casa e incluso la familia dejan de ser refugio y lugar seguro. ¿En quién podemos confiar, entonces? Las contradicciones de los familiares de María Marta, sus actitudes incomprensibles y lo “pintoresco” de algunos protagonistas del caso se sumaron para hacer de la docuserie tema de conversación obligado, igual que hace 18 años cuando sucedió el crimen.
Tal vez sea ese desajuste de la realidad, ese quiebre en la normalidad, lo que nos fascina de estos casos. Resolver el acertijo es una manera de restaurar el orden. Si te divierte jugar a ser Sherlock Holmes, prepará la gorra y la pipa: acá te presentamos cinco documentales sobre crímenes sin resolver que no te van a dejar dormir.
The Staircase
Un clásico imprescindible del True Crime, que tiene varias similitudes con el caso Belsunce. En diciembre del 2001, Michael Peterson, un escritor y veterano de Vietnam de buena posición económica, realiza una llamada a emergencias: su esposa Kathleen sufrió un accidente y yace en un charco de sangre en la escalera de su casa. De pronto se convierte en sospechoso y acusado de homicidio. Y, eventualmente, accede a darle al realizador del documental acceso al “detrás de escena”: las reuniones de la defensa discutiendo estrategias, su “entrenamiento” para presentarse ante el jurado, su vida familiar y el propio juicio. La serie condensa en 13 episodios más de 15 años de filmación, en los que acompañamos a los protagonistas y los vemos, elipsis de por medio, envejecer ante nuestros ojos.
Las hijas adoptivas en el juicio. 
Los Peterson en los buenos tiempos.
Peterson es culto, inteligente, tiene sentido del humor. Por momentos, su excesiva teatralidad resulta sospechosa. Cada nuevo secreto que se devela agrega una nueva capa, un nuevo matiz a este personaje inaprensible. Ahí reside su riqueza narrativa: en sus contradicciones y su su ambigüedad.
¿Es el padre cariñoso al que sus hijas adoptivas defienden? ¿O es un monstruo que mató a golpes a su esposa y, años atrás, a la madre de esas mismas hijas? ¿Se puede ser ambas cosas? Queda en el espectador decidir las respuestas.
Shadow of truth
Esta docuserie israelí de cuatro episodios se inicia con la muerte en 2006 de Tair Rada, una chica de 13 años que aparece asesinada con brutalidad en el baño de su escuela, probablemente el lugar seguro por excelencia, después de la casa, en el imaginario social.
Un inmigrante ucraniano es declarado culpable del crimen. 
Una imagen de Shadow of truth.
El acusado es Roman Zadorov, un inmigrante ucraniano que trabaja en la escuela y no habla bien el idioma. Aunque inicialmente Zadorov confiesa el crimen y hay ciertas pruebas que lo incriminan, el documental muestra cómo parece haber sido forzado y manipulado por la policía para inculparse. Así, se hace eco de la opinión pública para quienes Zadorov es apenas un chivo expiatorio, un culpable rápido y fácil para tranquilizar a la población. De hecho, como consecuencia del pobre trabajo policial, rápidamente surgen grupos de personas que a través de las redes sociales intentan resolver el caso y, sin evidencia alguna, acusan a las amigas de Tair.
En el último capítulo, un testigo de identidad reservada presenta una declaración que nos descoloca, no solo por lo extraño del relato sino porque nos despoja de aquello que, en gran medida, buscamos al intentar resolver, desde nuestras casas, un crimen como este: la tranquilidad de haber encontrado una razón, una lógica y un sentido.
Casting JonBenet
Seguramente muchos conocen la historia de JonBenet Ramsey, la niña de 6 años, reina de concursos de belleza, que apareció asesinada en el sótano de su casa en 1996, luego de un inverosímil intento de secuestro que hizo que las sospechas de todos recayeran sobre su familia. Quizás por eso, los creadores de este documental decidieron adoptar una perspectiva diferente y contar la historia a través de un grupo de actores de la zona donde vivían los Ramsey, que se presentan a una audición para representar a los protagonistas del caso.
Las candidatas para representar a JonBenet. 
Escena final del documental.
Vestidos como los padres de JonBenet, los actores intentan entender sus sentimientos y motivaciones para poder representarlos. De la misma manera en que lo hacemos los espectadores (y como lo hizo, en su momento, la opinión pública), analizan su comportamiento, su lenguaje corporal, especulan sobre los detalles del caso y su posible culpabilidad. Y poco a poco, van contándonos sobre ellos mismos y sus experiencias personales, en los puntos en que de alguna manera se tocan con la historia a representar.
Hacia el final, el documental nos muestra a todos los candidatos ensayando al mismo tiempo, en la misma sala, como sombras repitiendo el pasado, una representación en simultáneo de las múltiples realidades posibles, una metáfora de esa verdad inabarcable e inaccesible.
Unsolved Mysteries
Esta remake del popular programa de los años 80 presenta en cada episodio un miserio diferente. Tiene dos temporadas hasta el momento. Nuestros episodios favoritos de casos policiales (hay también paranormales) son:
Misterio en la terraza. Un recién casado desaparece por una semana y aparece muerto en la sala de reuniones de un hotel, cerrada y con el techo perforado.
Trece minutos. Una peluquera habla por teléfono con un cliente. 13 minutos después, otra llamada queda sin respuesta. Descubrir qué pasó en esos pocos minutos es la clave para resolver el crimen.
Episodio Misterio en la terraza. 
Episodio Muerte en Oslo
Asesinato en Washington. Un ex funcionario del Pentágono y asesor presidencial es encontrado muerto en un basural después de que lo vieran actuando de manera extraña.
Muerte en Oslo. Una mujer aparece muerta, en un aparente suicidio, en un hotel noruego de lujo. La causa de su muerte y su identidad son, hasta hoy, un misterio.
La dama del lago. Una mujer es encontrada muerta en un lago helado. Nadie se explica cómo llegó hasta allí, con tacos altos, a través de un área rocosa y nevada.
Una buena opción para quienes no tengan tiempo de mirar una serie completa o para quienes prefieran una estructura narrativa clásica, breve y efectiva.
El caso Alcásser
En 1992, tres niñas de 14 y 15 años, Miriam, Toñi y Desirée, desaparecieron en Alcásser, España. El caso capturó la atención de los medios durante los 75 días que pasaron hasta que encontraron sus cuerpos, y mucho después también.
Las niñas desaparecidas. 
Los familiares en la TV, pidiendo por la verdad.
El documental cuenta y muestra quizás más de lo necesario de este crimen terrible. Lejos está, de todas formas, de los diarios y programas de televisión de la época, que hicieron picos de rating y que, con una ética periodística cuestionable y nula perspectiva de género (recordemos que aún no existía el concepto de femicidio), relataron detalles escabrosos, expusieron innecesariamente a los familiares y dieron lugar a todo tipo de hipótesis disparatadas
El caso no estaría en una lista de crímenes sin resolver (hay un condenado y un prófugo) si no fuera porque Fernando García, el padre de una de las víctimas, junto a un cuestionable detective privado, están convencidos de que los asesinos están sueltos y pertenecen a altas esferas del poder. Muchas personas, después de escuchar sus teorías una y otra vez en programas de televisión, los apoyan y rechazan la resolución judicial, decepcionante e insuficiente en su simplicidad.
El documental es una crítica al accionar de los medios de comunicación y nos hace cuestionarnos sobre los límites al momento de querer informarnos sobre estos casos “interesantes”. Mientras tanto, Miriam, Toñi y Desirée se pierden entre las teorías y los relatos que se multiplican y que, casi ignorándolas, intentan reconstruir el crimen.
