Vivo en Buenos Aires desde el año 2001 (mal año si los hay). Empecé estudiando Ciencias de la Comunicación, actuación, y trabajando de lo que apareciera para armarme la vida en la ciudad de la furia. Cuando sentí que podía con todo, como se suele sentir a los 20 años, corté con lo que me enseñaron que era menos seguro
, el teatro, el arte. Y cuando quise tener dinero para vivir mejor, cambié de Ciencias de la comunicación a asuntos más comerciales. Así terminé de crecer, trabajando el empresas, primero de logística y más tarde en ventas, en marketing, en publicidad, en programas de fidelidad, atendiendo a grandes empresas como clientes. Pero como uno siempre vuelve, y debe volver, al origen, un buen día, con parte de la vida más o menos armadita, sin lujos pero sin carencias, entendí que mi vocación está en la expresión. Y en esa experiencia estoy aprendiendo, cada día más, sobre teatro, sobre fotografía, a escribir, a desarrollar contenidos y a difundirlos por medios digitales, y la lista seguirá creciendo porque en eso estoy empeñado.