El cine Lorca una de las pocas salas de la calle Corrientes que sigue apostando, de manera casi aislada y solitaria, al cine europeo, asiático e independiente.
Tiene 2 salas, una inmensa y otra pequeña, con pintorescas paredes recubiertas en madera. Se encuentra en una ubicación ideal para los amantes de la calle que nunca duerme: cerca de las pizzas de Güerrin, las pastas de Pippo, las librerías y las disquerías porteñas.
El cine Lorca formó parte de los desaparecidos cines de la L: Lorraine, Loire, Losuar y Lorange. Un grupo de cines que estuvieron en auge durante la década del 60, y que se caracterizaban por priorizar las obras cinematográficas de lenguaje intelectual, psicológico e ideológico de grandes creadores, como Ingmar Bergman, Federico Fellini, Luchino Visconti, David José Kohon, Lindsay Anderson, entre muchos otros.