Yo Me Tengo Que Bañar y A Nadie Le Importa

Es la historia de Rocío una joven escritora que harta de intentar encontrar una motivación para llevar adelante su causa artística, opta por buscar alternativas para ganarle la pelea a su angustia existencial. Frente a las preguntas comunes relacionadas a “¿quién soy?y¿qué será de mí?” nunca deja de pensar, y en el medio de estos cuestionamientos entra en el “fetiche” de querer lastimarse sin poder conseguir fenecer.

Un entorno con intensos claros oscuros que oscilan en la misma órbita de preguntas, pero de alguna manera le encuentran la vuelta para seguirla.

Una travesti que convive con el reloj de vida que establece su esperanza de vida.

Una enfermera que sin ser madre es más madre que nadie.

Una prostituta que no deja de pensar en cómo salir de la dependencia.

Una señora que nunca va a dejar de buscar a los hijos que no tiene.

Un hermano futbolista que no pudo dejar de querer serlo viaje a donde viaje.

Un músico enamorado de alguien no correspondido que no va a dejar de intentar tocar aquella pizca de chance que alguna vez le mostraron.

Una madre que no puede renunciar a su cuerpo ético, le cueste a quien le cueste.

Un padre laburante, orgulloso de ver la vida desde el punto de vista de quien la construye con las manos.

Muchos eslabones más que no juzgan, buscan entender aquello que parte misteriosamente de la pasión.

Rodeada de un contexto abrumador, que la alienta a seguir peleando por alejarla de su angustia, en plena etapa de recuperación, no abandona la contingencia con la voz de sus fantasmas, reviente quien reviente.

¿Podrá Rocío alguna vez inventarle un sentido a la vida?.