Tomás Maglione presenta Worldaso donde a través de rastros reales el hombre se abre paso hasta dar con un mundo sobre el cual posa su mano y se reconoce. Es la historia estándar del hombre. Unos segundos después, sus deseos se lo llevan a otra parte, quiero ser una botella de plástico y vivir para siempre
se repite. Mientras tanto, esas voluntades están ahí afuera comenzando a cada instante como un estribillo de bandita punk. La fantasía no existe.