Trabajo nocturno reúne una serie de obras que Carlos Herrera recorre desde hace cuatro años. Esta serie, asociada a cuatro palabras: tiempo, locura, sexo y muerte, nos acerca a la respuesta sobre lo existencial en su vida.
Las obras, de carácter autorreferencial e intimista, proponen un encuentro tradicional con la escultura en el que cada una de ellas devela el imaginario del artista.