El tango es una música, una danza y es una voz entre múltiples voces pero, por sobre todas las cosas, es la expresión de una sociedad. Como dijera Ricardo Horvath “siempre se cantó con opinión” y ya desde sus primeros poetas - sensibilizados por la cuestión social – la denuncia y la reivindicación encontraron una voz en el tango.
La exposición propone un recorrido a través de discos, partituras y fotografías donde los distintos compositores reflexionan sobre su propia coyuntura social.