El cuarto largometraje de Roberto Rossellini fue una auténtica revelación, un conmovedor drama sobre la ocupación nazi de Roma y de aquellos que lucharon en su contra. Roma, ciudad abierta, fue concebida y rodada en medio de las ruinas de la Segunda Guerra, con una notable inmediatez en cada uno de sus planos. Marcando un momento bisagra en la historia del cine, esta obra obtuvo premios en todo el mundo y sentó las bases de un nuevo movimiento cinematográfico: el neorrealismo.
Dirección: Roberto Rossellini //