Un audaz y original abordaje propuesto sobre la obra y la multifacética personalidad del genial director neoyorquino. La muestra está integrada por una instalación y 25 pinturas de gran tamaño, en algunos casos acompañadas por video-instalaciones. Recurriendo a las técnicas más variadas –pintura, dibujo, fotografía, fotogramas de películas intervenidos-, Echarri ofrece una impactante visión de Woody Allen y hasta se da el lujo de que en sus pinturas el célebre director interactúe con personajes como César Vallejos o el Gauchito Gil. -Precisamente, en febrero de 2012, el artista presentó en el Borges una exhibición titulada Plegaria por el Gauchito Gil que despertó gran interés del público y la prensa-.Echarri afirma que sus “obras son simplemento un tributo y un reconocimiento, a un artista lucido del tiempo y la sociedad que me toca vivir”. Y agrega: “Si algo caracteriza a nuestras sociedades y al cine de Allen es el individuo sumergido en sus obsesiones y su inestabilidad emocional, producto de factores políticos, sociales y económicos. Por ello, quienes constituimos el público de sus películas nos sentimos no solo interpretados por su aguda mirada sino de alguna manera reflejados en algunos de sus variados y reconocibles personajes. Entre ellos el del propio Woody que también es un personaje de su cine”.Sobre el artista: Hugo Echarri estudió con notables maestros, como Helios Gagliardi, Bernardo Di Bruno y René Pietrantonio, pero se reivindica “como un artista autodidacta, que abreva en los viejos y nuevos maestros del dibujo y la pintura que admira: Leonardo, Caravaggio, Turner, Van Gogh, Francis Bacón, entre los extranjeros, y Castagnino, Policastro, Raúl y Carlos Alonso, Guillermo Roux y Miguel Dávila entre los nuestros”.Ha realizado exposiciones individuales en diversos espacios, entre ellos la Galería Alicia Brandy, y el Centro Cultural Borges. Participó también de exhibiciones colectiva, ferias y salones y obtuvo destacadas distinciones, como el 1er. Premio de Dibujo en el 1er Salón del siglo XXI UMSA-FUNDEJUS.
Bajo la curaduría de Diana Saiegh y Virginia Fabri.