La película narra la cruel historia de Salvador (Ricardo Darín) hombre de pocas palabras que vive aislado en el medio de la Patagonia. Su silencio obedece a un hecho trágico sucedido en su juventud que lo alejó del resto de su familia. Sin embargo, el pasado lo encuentra en la figura de su hermano Marcos (Leonardo Sbaraglia) quien, luego de la muerte de su padre, llega junto a su esposa Laura (Laia Costa) hasta la cabaña para tratar la venta de los terrenos que comparten por herencia. El cruce, en medio de ese paraje solitario e inaccesible, reaviva un secreto dormido durante años.