El drama de los mensúes en los yerbatales misioneros ya había sido tratado por Mario Soffici en Prisioneros de la tierra (1939) pero Del Carril lo abordó en términos más brutales y pragmáticos: no es el fatalismo de la tierra lo que oprime a sus personajes, sino la lisa y llana explotación del hombre por el hombre. En 1952 nadie podía dudar de la militancia peronista de Hugo del Carril y sin embargo el realizador encontró grandes dificultades para poder concretar este film, desde la proscripción del autor Alfredo Varela hasta la escasez de material virgen para completar el rodaje. Nada de eso impidió que el resultado final se transformara en uno de los más importantes de toda la historia del cine argentino. Pese a ello, hace años que no se lo podía ver en una copia buena de 35mm y sus negativos originales se perdieron. APROCINAIN rescató un internegativo del film del que se obtuvo la copia nueva que se exhibe en este ciclo, gracias al aporte de Malba, Kodak y Cinecolor.
Argentina, 1952, 85'
Dirección: Hugo del Carril //