Este es un caso rarísimo de film noir ambientado en la revolución francesa, cuyo McGuffin es la agenda del sanguinario Robespierre (interpretado con expresionista alegría por Richard Basehart). La combinación de la pericia narrativa de Anthony Mann con la imaginación formal del fotógrafo John Alton produjo esta obra maestra mal conocida, en la que cada escena tiene un motivo de suspenso y cada plano es un tour de force. No es menos importante, incluso dramáticamente, la sensualidad de Arlene Dahl.Reign of Terror o The Black Book, Estados Unidos, 1949, 88'.