El sábado 26 y domingo 27 de octubre a las 19h, CNB presenta la instalación performática Una boca de memoria, una obra que surge del encuentro con los diarios manuscritos de la abuela de la artista Sandra Pauli, escritos en Berlín entre 1943 y 1982. A lo largo de 39 volúmenes, su abuela documentó minuciosamente sus actividades cotidianas, entrelazando tareas domésticas con reflexiones sobre la realidad política de la época, sin establecer jerarquías entre ambas.
Esta confluencia entre lo íntimo y lo político adquiere especial relevancia al narrar episodios durante el Tercer Reich, poniendo de manifiesto cómo las rutinas diarias pueden coexistir con un contexto sociopolítico amenazante. La instalación también establece un diálogo con la experiencia colectiva de la pandemia de Covid-19, en la que muchas personas buscaron refugio en las tareas domésticas como un modo de sobrellevar la angustia de un futuro incierto y un presente sofocante.
A su vez es un encuentro con la pulsión de muerte del universo familiar de la artista, un linaje femenino que rechaza la comida, que se seca, que busca su refugio en el quehacer doméstico y las rutinas interminables.
Colaboradores: Andrea Fasani (performer), Eduardo Avendano (performer), Sabine Kuhn (fotógrafa), Claudia Toro (sonido maquetas), Rosario Oliva (arte textil), Susana Barbará (videoarte), Luis Conde (sonorización en vivo) Lautaro Abrego (sonorización en vivo) Gabriele Pauli (esculturas).