Un nene que sueña pesadillas, un mago muy atolondrado, una maestra risueña, una detective medio despistada y un director de cine gritón; todas las historias tienen en común que les falta una vuelta de tuerca.
Los chicos ayudarán a crear estas historias proponiendo lugares, objetos, palabras mágicas, etc, como si fueran guionistas en vivo del espectáculo que están viendo. Ellos proponen y los personajes disponen en un espectáculo donde la imaginación es la protagonista.
Formato de improvisación teatral para toda la familia, preferentemente a partir de los 4 años.