El sueño máximo de Gaturro es convertirse en una estrella de rock. Su amiga Agatha conociendo este deseo le lleva la propuesta para presentarse en un concurso de bandas. Gaturro debe intentar dejar sus temores atrás y animarse.
Entre idas y vueltas acepta esta invitación. Cegado por el brillo y su egoísmo comienza a preparase para ganar el concurso sin tener en cuenta que está dejando de lado a Agatha, quien al sentirse triste y desplazada, decide alejarse.
Gaturro se dará cuenta que sin su amiga no sabe qué hacer y tratara de reconciliarse con ella y lograr que acepte volver a ser parte del grupo.
Así Gaturro descubre que el amor, la humildad, el esfuerzo y sobre todo compartir momentos junto a sus amigos, son más importantes que ganar.