"El mundo que huye
Una mano pálida intenta asir el aire, rodeada
de agrupaciones de frutas maduras y trenzas
interrumpidas por el blanco del papel. Otra
mano sujeta con gran delicadeza un pañuelo o
mantilla con ojos inexorablemente humanos.
Los dibujos de Vir son la prueba más exacta de
su inteligencia mordaz, excusan cierto sarcasmo,
que como objeto náufrago deriva en la
calma y la contemplación.
Su mundo está formado por elecciones pacientes,
inevitables. Hay una seguridad y una actitud
zen: dueña de su propio destino, protegida de
las inclemencias, construye su propio refugio,
hecho de ramas pequeñas e hilitos dorados..." Darío Aguilar.
Muestra de Virginia Spinelli.