La poética de Carolina Cerverizzo reservó un lugar especial para la línea recta. Sus composiciones se fueron organizando alrededor de un conjunto de líneas que se reúnen o se distancian, se alinean o se entrecruzan, pero siempre buscan provocar situaciones nuevas.La decisión de atravesar estas tramas lineales es una manera de aceptar la aventura del descubrimiento de lo desconocido, lo cual es, también, una manera de reconocerle al arte su capacidad para develar lo no-visto, para provocar el encuentro con lo no-dicho, porque el arte es, siempre, una invitación que deber ser leída entrelíneas.