Funciones distendidas Las funciones distendidas son funciones de artes escénicas sutilmente modificadas para propiciar un espacio relajado y menos formal que el espacio teatral clásico. En cuanto al material escénico las modificaciones son mínimas, sin modificar la obra sustancialmente.
A modo de ejemplo, nombramos algunas de las modificaciones necesarias a la hora de la puesta de una obra teatral distendida: Se debe suavizar la intensidad del sonido y la luz.
El sonido, en general, debe estar a volumen bajo y lo más natural posible. No debe ser
envolvente; se deben evitar sonidos agudos, estridentes o fuertes (gritos, rugidos, sirenas, alarmas, sonidos de explosiones, golpes etc).
La actitud de la sala debe ser siempre tolerante con respecto a movimientos y/o sonidos por parte del público. La experiencia accesible va más allá de la obra propiamente dicha, a saber: se entrega material anticipatorio como primera conexión entre la obra y los públicos; se organizan encuentros con los personajes antes de la función, se disponen de espacios asignados para el descanso y la distensión por fuera de la sala; y un equipo de facilitadores de la salud mental están presentes en la sala a fin de contención y acompañamiento.
El Salpicón (1995) es un musical infantil, de la famosa dupla Gianni-Midón. Cuatro intérpretes, dos actores y dos actrices, encarnan diferentes papeles, en un paseo por diversas escenas que nos invitan a sumergirnos en el universo imaginario de Hugo Midón, traduciendo la realidad en escenas que nos conmueven, divierten y hacen reflexionar. Recuperando el valor del juego, los intérpretes cambian de personaje a la vista del público, generando espacios y situaciones con lo que tienen a mano, transformando lo cotidiano en fantástico y jugando con la libertad tan propia de los chicxs cuando juegan sin ser vistos. Hugo Midón y Carlos Gianni revolucionaron la comedia musical y el teatro infantil. Sus obras y canciones interpelan a grandes y chicxs por poseer un gran sentido del humor, crítica social y reflejo de la actualidad. Sus materiales les brindaron a lxs niñxs un lugar como seres pensantes y generaban un guiño cómplice a lxs mayores, lo que permitía transitar y reflexionar acerca de las cuestiones sociales, los vínculos, las relaciones comunitarias, los derechos de niñxs y la oportunidad de imaginar y vivenciar sin límites y tan solo con el poder del juego y la imaginación. Lo interesante del trabajo de los autores es esta relación íntima y profunda que generó con las infancias, desde un lado lúdico y por qué logra que sus materiales no pierdan vigencia ni humor.
Actores: Carla Tarantino , Nicolás Serraiti, Gustavo Monje, Lucía Braude // Dirección: Marcelo Albamonte //