Sobre su película El grito, que anticipa sus temas posteriores, Michalengelo Antonioni ha dicho: En El grito, por ejemplo, trato mis temas preferidos pero abordo las emociones de manera muy diferente. Antes mis personajes aceptaban sus fracasos y sus crisis emocionales. Aquí, en cambio, hay un hombre que reacciona y trata de superar su infelicidad. Traté a este personaje con mucha mayor empatía. Incluso los paisajes cumplen una función diferente. Si en otras películas utilicé el paisaje para definir mejor una situación o una condición espiritual, en El grito traté de que fuera un paisaje de la memoria: el campo de mi infancia, visto a través de los ojos de alguien que regresa a su hogar tras una intensa experiencia emotiva y cultural. En El grito ese regreso tiene lugar durante la estación más apropiada, el invierno, cuando el vasto y abierto horizonte se transforma en contrapunto de la psicología del protagonista.
Il Grido, Italia - Estados Unidos, 1957, 116'.