El productor de cine estadounidense Jeremy Prokosch contrata al respetado director austriaco Fritz Lang para dirigir una adaptación cinematográfica de La Odisea de Homero. Insatisfecho con el tratamiento que Lang da al material como una película artística, Prokosch contrata a Paul Javal, novelista y dramaturgo, para reelaborar el guión. El conflicto entre expresión artística y oportunidad comercial es paralelo a la repentina extrañeza de Paul con su esposa Camille Javal, quien se vuelve distante con Paul después de quedarse sola con Prokosch, un playboy millonario.