El cuerpo es Avant Garde de Sofía Quirno se compone de un conjunto de pinturas de gran escala, esculturas y animaciones que revisitan las relaciones entre el cuerpo, el tiempo y el deseo.
Frases y percepciones recogidas al transitar por la calle en el día a día, collages pintados provenientes de cuadernos en los que la artista trabaja hace más de doce años, y composiciones fragmentadas con referencias a tajos, huevos y ciclos, plantean en la muestra preguntas sobre cómo se programa y cómo se reprograma la autopercepción de un cuerpo en relación a su capacidad de gestar. En otras palabras, El cuerpo es Avant Garde, explora promesas, incomodidades, libertades y frustraciones en torno a cómo se moldean la subjetividad, la imaginación y las expectativas sobre el tiempo reproductivo de un cuerpo.
Con una práctica de taller en la que acopla distintas materialidades, Sofía Quirno presenta una instalaciones inmersivas centradas en pinturas donde los elementos en el espacio hacen ecos unos de otros. Sus obras citan referencias a mujeres absorbidas dentro de paisajes lunares y realizan homenajes a artistas como Sarah Lucas y Francesca Woodman que en el arte contemporáneo hicieron explotar huevos a su alrededor. Repletas de referencias metabolizan imágenes fragmentarias que aluden a situaciones irresueltas donde la toma de posicionalidad se centra en abrazar la duda. Montadas sobre estructuras escultóricas se presentan en la sala como mobiliario de una hospitalidad diseñada para la incomodidad y el humor.
Artistas: Sofía Quirno // Curador: Laura Hakel //