El crítico Homero Alsina Thevenet escribió sobre esta película: La primera virtud de El 41 es, sorprendentemente, la de ser un drama de amor. No es una historia romántica ni una exaltación lírica ni una frivolidad pasajera: es realmente un conflicto entre una guerrillera revolucionaria y un oficial zarista, que es a un tiempo su amante y su enemigo. La segunda virtud es la notable unidad de su narración, que comienza desde un hecho común y en cierto sentido histórico (una patrulla de guerrilleros rojos perdidos en las arenas del desierto durante la revolución) y va progresando como un relato de aventuras, particularizándose sin pausa hasta llegar a su caso individual.
De Grigori Chukhrai.Sorok pervyy, URSS, 1956, 88'.