Alfredo Londaibere mostró muy tempranamente el deseo de conformar su propia colección de arte al tiempo que ensayaba un talento especial para organizar entornos domésticos sofisticados.
Como un bricoleur, hacía expediciones por el Ejército de Salvación para rescatar mobiliario en mal estado, pero con buenas señales de estilo, que luego integraba al paisaje hogareño con combinaciones atípicas para finales de los 80 y comienzos de los 90.
Sus casas siempre se distinguieron por esos toques de autor, al igual que por una biblioteca que crecería hasta concentrar un volumen notable de publicaciones que seleccionaba con el mismo cuidado con el que reunió obras de otrxs artistas en torno a lo que hoy presentamos como la Colección Londaibere.
Es la primera vez que este conjunto comprendido entre 1982 y 2014 toma estado público y permite advertir la agudeza de su mirada que dio forma a este repertorio de obras que conservan la memoria de una red artístico-afectiva y las marcas ineludibles de una época.
Las obras se sumaron unas a otras a su colección mediante compras e intercambio entre artistas, una práctica muy extendida que Alfredo usaba con mucha discreción.
Colección Londaibere se organiza de modo episódico y busca subrayar la estrecha relación que existe entre su enunciación como artista, los criterios que construyó en su rol como curador y la historia de su colección que estamos comenzando a contar.
En algún sentido, el armado de este acervo dibuja un itinerario que recorre las diferentes escenas y contextos en los que actuó: el Grupo de Acción Gay promediando los 80, los primeros años de gestión de Gumier Maier al frente de la galería Rojas (especialmente hasta la presentación de la exposición Algunos Artistas en el Recoleta en 1992) y posteriormente su gestión como curador entre 1997 y 2002, Belleza y Felicidad, la experiencia misionera, la ética de la docencia, el círculo de amistades y sus vínculos intergeneracionales, su fascinación por Benito Laren, entre otros aspectos que lxs visitantes podrán advertir.
Una colección es un mundo desplegado sobre sí mismo que contiene los gestos y las inflexiones subjetivas de quien la ensambló, pero también es un fenómeno pluridimensional que aporta materialidad a las historias del arte. Confiamos que esta serie de exposiciones aporten nuevas imágenes y miradas a los relatos por venir.
Curador: Alfredo Londaibere //