Primero fue una de las últimas estrellas del cine argentino clásico, ese que con Torre Nilsson abandonaba las viejas fórmulas y se sumergía en la modernidad. Después fue un realizador asombroso, con dos obras maestras realizadas en un mismo año, que son parte esencial del nuevo cine de los 60. Y aún después fue una presencia tremenda en una multitud de films que lo requirieron, siempre magnético y eficaz sin importar el tamaño del personaje que le asignaran. Fue también un hombre comprometido socialmente, que puso el cuerpo en Los traidores (1972) de Raymundo Gleyzer, sufrió amenazas, atentados y exilio. Cuatro de los films más importantes que dirigió se verán este mes en Malba Cine.

PROGRAMACIÓN:

DOMINGO 9

20:00 Shunko

DOMINGO 16

20:00 Alias Gardelito

DOMINGO 23

20:00 La Raulito

DOMINGO 30

20:00 Cuarteles de invierno

Última fecha

dom

30

marzo

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