Cíclo invocaciones: Artaud, Invocación IV.
Después de la primera edición, en la que se vieron Meyerhold y Jarry, en agosto de este año comenzó la segunda entrega del Ciclo Invocaciones en el Cultural San Martín.
Un manicomio reducido en la actualidad a una oficina, cuyos pabellones se han convertido en una playa de estacionamiento. El trabajo es, entonces, estacionar coches en la playa. Se extrañan los tiempos del electroshock. Ahora solo queda darse con la heladera. Está el doctor Nacho que viene de declarar en la comisaría después de una noche en la que unos camiones hidrantes vinieron a limpiar de locos el portón. La enfermera Marta, que no quiere jubilarse. La ayuda César, un interno devenido en personal de mantenimiento. También Fabio, otro ex interno que quiere volver, mientras intenta escribirle algo a Nacho, que no termina de redondear. Y por último Moni, que trabaja en un salón de fiestas. En este mundo hay restos de cheescake que trae Moni, un ruido eterno de heladera, y un baño tapado a donde va insistentemente Fabio para defecar y poder escribir. Los signos sobre la vida y obra de Artaud, especialmente sus años psiquiátricos, fueron estímulos para generar un mundo autónomo que ocurre en una Buenos Aires donde se reprime a los locos.
Artaud es la cuarta entrega del Ciclo Invocaciones, antecedida por Meyerhold de Silvio Lang, Jarry de Mariana Chaud y recientemente Brecht de Walter Jakob y Agustín Mendilaharzu.
Elenco: Diego Cremonesi, Pablo De Nito, Elvira Onetto, Verónica Schneck y Rafael Solano
Escenografía y realización: Ariel Vaccaro
Diseño Sonoro: Carmen Baliero
Ingeniero de Sonido: Marcos Zoppi
Vestuario: Magda Banach
Iluminación: Matías Sendón
Asistencia de dirección: Adrián Silver
Producción ejecutiva: María Laura Santos
Dirección: Sergio Boris