Exposición de obras donadas por las hermanas Castellano Fotheringham."Era como una reina”. Así definía mi padre, Félix Luna, a María Isabel Fotheringham. Su personalidad y exquisito humor, su piel blanca y sus ojos claros, su presencia y su voz daban cuenta de una mujer singular. Ceramista por elección y amor, sus piezas se encuentran en varias instituciones nacionales. -Felicitas Luna, directora del Museo.
De una madre sensible y con un gran amor por el país y sus raíces, sus hijas Isabel y María Castellano Fotheringham fueron galeristas, ceramistas, anticuarias, coleccionistas y donantes. Una perfecta unión fraternal y de proyectos que hasta el día de hoy continúa.