Mujeres que viven al borde de un precipicio amoroso que las atrae y aterroriza. Tres monólogos intervenidos en el que se ensamblan historias que se unen en una situación común: “No poder soltar”. Seres atrapados en placenteras adicciones y en circunstancias de fracasos no asumidos, responsabilidades puestas en el otro
, engaños, miedo a la soledad, proyección de la vejez, como temas motores. Cada una de las mujeres lleva adelante un doble diálogo, por un lado con la presencia masculina que interpelan y por otro lado, con un músico violista que las acompaña con su instrumento.
La puesta y dirección es de Cintia Miraglia y el elenco lo componen Mónica Driollet, Leticia Torres y Estela Garelli.