Después de años de ausencia, Firmino, un hombre culto, regresa a su pueblo natal, una pequeña comunidad de pescadores negros descendientes de esclavos en el nordeste de Brasil. Su objetivo es intentar liberar a los lugareños del misticismo y, en particular, de su creencia en el Candomblé, al que considera causa de la opresión política y social. Primer largometraje de Glauber Rocha, puntapié para uno de los realizadores más importantes de América Latina.
Dir. Glauber Rocha
Brasil, 1962, 80'.